estrés en Alcorcón

¿Puede el estrés acabar afectando a mi sonrisa?

La respuesta es sí. El estrés es, por ejemplo, el mejor amigo de la sequedad oral. Al afectar al sistema nervioso central, las glándulas salivares no consiguen producir saliva correctamente. Si por lo general tienes la boca seca, acude a un profesional para buscar soluciones a tu medida, puesto que no suele ser una buena señal.

La hormona del estrés puede generar inflamación, lo que propicia un mayor riesgo de la enfermedad periodontal. Asimismo, el estrés afecta a la eficiencia a la hora de cepillarse los dientes y usar hilo dental, llevándonos a no tener una adecuada higiene y acumular una mayor cantidad de residuos en las encías.

La articulación temporomandibular es la que une la mandíbula con el lateral de la cabeza y es fundamental, por ejemplo, en el habla, al tragar y en la masticación. Si el disco articular no se encuentra en la posición adecuada o si le estamos sometiendo a una presión permanente al apretar los músculos por estrés, es muy posible que no funcione con normalidad, produciendo dolor.

El estrés, al debilitar las defensas, nos hace vulnerables a sufrir infecciones de parásitos y hongos. Es necesario que, si notas síntomas, acudas a un profesional y no busques solución por tu cuenta, ya que puedes empeorarlo.

El bruxismo, además de por otros motivos, se origina por problemas emocionales y situaciones de agobio. Puede provocar un desgaste importante en los dientes, debilitándolos hasta el punto de llegar a romperlos.

Ahora que ya conoces todos los problemas que el estrés puede ocasionar, toma conciencia de ello y trata de relajarte, porque tu salud general y bucodental en particular, está en juego. Recuerda, además, revisar tu boca periódicamente para tratar posibles problemas orales en nuestra clínica dental en Alcorcón, Móstoles o Fuenlabrada. ¡Visítanos y te ayudaremos!

 

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